Al mismo tiempo, un funcionario ruso insistió en que Moscú necesita garantías “escritas en piedra” de que Ucrania y Georgia nunca se convertirán en miembros de la OTAN.
Rusia aseguró a Estados Unidos, durante la primera ronda de negociaciones de seguridad en Ginebra, que no tiene intención de atacar a Ucrania, al tiempo que consideró que sería un “gran error” si la OTAN se niega a conceder garantías de seguridad a Moscú.
“No tenemos ningún plan, ninguna intención de atacar a Ucrania, y no puede haberlos”, aseguró Serguéi Riabkov, viceministro de Exteriores ruso y negociador jefe, en rueda de prensa en la misión permanente de su país ante la ONU transmitida en directo por la televisión pública.
Riabkov subrayó que también insistió a su colega estadounidense, la subsecretaria de Estado de EE.UU., Wendy Sherman, en que tampoco hay motivos para temer una posible escalada en relación a Ucrania, quien denunció junto a Washington planes de una invasión rusa para principios de 2022.
“Todas las operaciones para la preparación militar de las tropas se efectúan en los márgenes de nuestro territorio, por lo que no hay motivo para temer un escenario de escalada”, señaló.