Dairo Antonio Úsuga, conocido como Otoniel, fue un importante traficante de cocaína y el líder de la pandilla más poderosa de Colombia durante más de nueve años.
En enero se declaró culpable de dirigir una organización criminal y contrabandear drogas al extranjero. Durante su sentencia, lamentaba sus acciones criminales. “Pido disculpas a los gobiernos de Estados Unidos y de Colombia ya las víctimas de los crímenes que he cometido”, manifiesta el hombre de 51 años.
Los fiscales lo describen como “el narcotraficante colombiano más importante desde [el líder del cartel de Medellín] Pablo Escobar” y dijeron que ayudó a enviar casi 100.000 kilogramos (220.500 libras) de cocaína a Estados Unidos.
La Administración de Control de Drogas de Estados Unidos lo califica como “uno de los narcotraficantes más violentos y prolíficos del mundo”.