Funcionarios de Georgia confirman que se enfrentaron a Trump en su intento de anular la victoria de Joe Biden
La Cámara de Representantes escuchó las declaraciones de los involucrados en las presiones de Donald Trump en su intento para anular los resultados de las elecciones presidenciales del 2020.
La audiencia presidida por el presidente de la Comisión, Bennie Thompson, se centró en los esfuerzos del expresidente en deshacer la victoria de Joe Biden a través de testimonios de los funcionarios de Georgia, Brad Raffensperger, secretario de Estado, y su adjunto Gabe Sterling, entre otros.
En el caso de Raffensperger, se tomó como principal punto la llamada telefónica que realizó con Trump en la que el expresidente le pedía que “encontrara 11 780 votos” para evitar la victoria electoral de Biden. Ante ello, Raffensperger le respondió “No estamos de acuerdo en que hayas ganado”.
Además, señaló que “los números no mienten” e indicó que después de un recuento manual de 5 millones de votos, los resultados se mantuvieron igual. Por lo que, desde entonces, Trump ha retirado el apoyo a estos republicanos.
Ante ello, el presidente de la comisión, Thompson, elogió a todos los funcionarios por ser “héroes” y mantener firme la “columna vertebral de la democracia”. Por su lado, la vicepresidenta del comité, Liz Cheney, señaló que “a Donald Trump no le importaban las amenazas de violencia. No los condenó, no hizo ningún esfuerzo por detenerlos”.
Si bien es cierto, el comité solo investiga el caso y no puede presentar cargos contra Trump, el Departamento de Justicia mantiene de cerca el caso.
Otros testimonios
Rusty Bowers, presidente republicano de la Cámara de Representantes de Arizona, comentó que pidió al equipo de Trump pruebas que demuestren el fraude, pero todo quedó en acusaciones sin sustento. Asimismo, señaló ante la Comisión que después de no aceptar el pedido de Trump, lo difamaron y atacaron públicamente; incluso comentó que había un hombre armado se burlaba de su familia.
Asimismo, funcionarios de Michigan, Pensilvania y otros estados declararon sus historias donde agregaron que se difundieron públicamente sus números de teléfonos y domicilios después de que rechazaron las afirmaciones de Trump.