El líder de la ultraderecha brasileña encabezó las multitudinarias protestas del 7 de septiembre en las que sus seguidores llegaron a defender la disolución de la Corte Suprema y del Parlamento a través de una “intervención militar” con Bolsonaro en el poder.
El vicepresidente de Brasil, el general de la reserva del Ejército Hamilton Mourao, descartó la posibilidad de una ruptura institucional o de un golpe de Estado en el mayor país latinoamericano pese a la “retórica fuerte” del presidente, el líder ultraderechista Jair Bolsonaro.
“No hay espacio para una ruptura en el siglo XXI. No podemos mirar lo que ocurrió en el siglo XX y trasladarlo a la actualidad. ¿Hay una retórica fuerte por parte de nuestro Gobierno? La hay. Pero no hay acciones que se correspondan a esa retórica”, afirmó Mourao.
El vicepresidente se pronunció sobre la crisis institucional en Brasil días después de que Bolsonaro, en manifestaciones ante miles de seguidores, los alentara a desobedecer órdenes de la Corte Suprema o decisiones del Parlamento contrarias a sus intereses.