La mayoría de las familias que tienen hijos con autismo a menudo se enfrentan a largos períodos de espera para recibir un diagnóstico, y en algunos casos, incluso después de obtenerlo, este diagnóstico puede no ser definitivo. Sin embargo, dos estudios recientemente publicados sugieren que una nueva herramienta de seguimiento ocular podría ayudar a los médicos a diagnosticar el autismo en niños de tan solo 16 meses con mayor precisión.
Warren Jones, director de investigación del Marcus Autism Center del Children’s Healthcare de Atlanta y titular de la cátedra Nien de Autismo de la Facultad de Medicina de la Universidad Emory, uno de los autores de ambos estudios, enfatiza que esta herramienta no pretende reemplazar a los médicos expertos. Más bien, la esperanza con esta tecnología de seguimiento ocular es que, al proporcionar mediciones objetivas que son consistentes en cada niño, pueda contribuir al proceso de diagnóstico.
Esta herramienta, conocida como Evaluación EarliPoint, ha sido autorizada por la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. (FDA) para asistir a los médicos en el diagnóstico y la evaluación del autismo, según los investigadores.
Tradicionalmente, el diagnóstico de autismo en niños se basa en la evaluación clínica de su historial de desarrollo, su comportamiento y los informes de los padres. Estas evaluaciones pueden llevar horas, y a veces, ciertos comportamientos sutiles relacionados con el autismo pueden pasar inadvertidos, especialmente en niños pequeños.