La tuberculosis (TB) en los niños es una infección bacteriana contagiosa que afecta a los pulmones, pero que también puede propagarse a otros órganos. Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), la edad pediátrica tiene más probabilidades de desarrollar formas de esta patología que pongan en riesgo la vida.
Los datos preocupantes no acaban aquí, pues estudios científicos calculan que podría tratarse de la enfermedad infecciosa más prevalente del mundo. Considerando su forma latente, se estima que el 33 % de toda la población global presenta la bacteria. Por ello, conocer los síntomas y la prevención de la tuberculosis en los niños se hace esencial.
Según el estudio citado, más del 10 % de los casos de tuberculosis detectados de forma anual suceden en niños. La Organización Mundial de la Salud (OMS) arroja una serie de datos esclarecedores en lo que a la situación de la patología se refiere. Algunos de ellos son los siguientes:
- La tuberculosis es una de las 10 principales causas de muerte en el mundo.
- Se estima que en el año 2018, 1,1 millones de niños enfermaron por TB.
- De todos estos casos, alrededor de 250 000 infantes fallecieron, sobre todo en casos de coinfección con VIH.
- La tasa de mortalidad de la TB es más alta en infantes entre 0-4 años de edad que en cualquier otro grupo poblacional.
Esto no es todo, pues otros estudios epidemiológicos subrayan que los niños pequeños tienen más probabilidades de que la bacteria se disemine más allá de los pulmones, lo que genera un pronóstico mucho más delicado. Por todas estas razones, conocer los síntomas de la enfermedad en infantes se hace vital.