La Visión recomienda: “Don’t Worry Darling” (2022)

Alice y Jack tienen la suerte de vivir en la comunidad idealizada de Victoria, una ciudad experimental en donde los hombres que trabajan para un proyecto secreto viven felizmente con sus familias.

“Dont’ Worry Darling” (‘No Te Preocupes Cariño‘) es una película dirigida por Olivia Wilde que generó mucha polémica desde antes de su estreno. Esto fue así debido a numerosos sucesos que fueron capturando la atención de la prensa y levantando la expectativa alrededor de ella. Para empezar, Shia Labeouf iba ser uno de los protagonistas de esta producción, pero renunció por altercados con Wilde, la cual luego no dudó en darle el protagónico a su actual pareja, la estrella de pop Harry Styles. Asimismo, el mencionado cantante encendió la discusión en redes al gestualizar un aparente escupitajo a Chris Pine en el Festival de Cine de Venecia, hecho que se volvió viral rápidamente. Por último, para hacer la lista corta, Florence Pugh, la actriz principal, desairó a Wilde al no asistir a la alfombra roja de Venecia y negarse a participar de la promoción de la cinta. Nuevamente, esto habría sucedido por diferencias con Wilde, a quien algunos acusan de haber boicoteado la obra desde el principio.

Dejando estos antecedentes de lado, cabe concentrarnos en la trama. Esta trata sobre una pequeña comunidad utópica llamada “Victoria”, en la cual reside una gran cantidad de parejas y cada una tiene su propia casa con todas las comodidades cubiertas. La convivencia entre ellos se presenta como agradable y perfecta, pero hay un pequeño detalle: todas las mañanas, los esposos deben marcharse a trabajar a primera hora y a sus amadas solo les queda esperarles de vuelta al final de su jornada laboral para compartir tiempo juntos. Esta misteriosa ausencia de los hombres por tiempo prolongado generará una gran incógnita, misma que la protagonista buscará resolver sin saber que ello le llevará a descubrir la siniestra verdad que esconde este mundo de fantasía. Si pudiera adelantar un juicio, debo mencionar que, si bien la premisa parece interesante, la verdad es que su ejecución termina por ser poco convincente y decepcionante.

Lo destacable

Dentro de lo poco que hay por destacar, lo primero sería el buen diseño de producción. Se supone que la historia está ambientada en los años 50, lo cual se logra verificar en el uso de vestuarios correctamente diseñados para ello, sobre todo en los vestidos que utilizan la mayoría de las mujeres, así como sus peinados. Asimismo, los interiores de las casas, tanto los electrodomésticos como la mueblería, dan esa sensación de estar sumergidos en esa época. Incluso, el uso de automóviles antiguos, muchos de ellos de lujo, es un deleite visual. Todo esto es acompañado por una fotografía bastante decente, la cual nos regala algunos encuadres simpáticos en escenas de alta tensión, ya sea dentro de algunas de las viviendas, o en el exterior del vecindario o de las locaciones desérticas.

Lo segundo a mencionar es el trabajo cumplidor de Florence Pugh en uno de los papeles protagónicos. La actriz encarna a Alice, la pareja de Jack (Harry Styles), y prácticamente carga en hombros con el peso actoral de toda la cinta aun sin despeinarse demasiado. Sucede que la valla no es tan alta, pues Styles queda lejos de estar a su nivel y el resto del elenco apenas si es intermitente. Su actuación sostiene la atención y la tensión del relato por gran parte del metraje, pues el rol de mujer que pasa por peripecias de todo tipo ya le es familiar y lo maneja a la perfección, tanto así que algunos no han dudado en señalar que es casi el mismo personaje que interpretó en ‘Midsommar’ (2019) y que le llevó a ganarse el favor de la crítica. En todo caso, está claro que, sin Pugh, habría poco o menos que salvar de esta obra en cuestiones de performance.

Lo cuestionable

Mi principal problema con este filme es el guion. Para ello, habría que remitirnos a los principios básicos de los thrillers. Lo primero que se necesita es generar una conmoción final al revelarse la resolución del conflicto, una que debe ser inadvertida y causar sorpresa, pero a su vez resultar lógica. Para esto, y aquí viene lo segundo, se supone que en el desarrollo se deben establecer los planteamientos suficientes para que este giro final y todo en la historia tome sentido y se justifique. En este caso, el primer punto se sostiene a duras penas, pero el segundo no.

Al respecto, mucho de lo que sucede en la trama no se termina de explicar ni se sugiere del todo, dejando incontables cabos sueltos. Hay varias preguntas interesantes que son propuestas, pero que no se resuelven de ninguna manera, así como decisiones de los personajes que suceden porque sí, sin justificarse y sin haberse resuelto paradigmas anteriores. Esto resulta en muchas situaciones incongruentes y que parecen haber sido establecidas al azar. De hecho, lo que es peor, no parecen relacionarse con una lógica propuesta desde lo artificial o lo absurdo si quiera, sino que claramente se nota que se debe a vacíos argumentales que olvidaron sellar y ni se preocuparon en hacerlo. Si bien el giro de tuerca final cumple con lo mínimo, a pesar de que no es tan impredecible como pretende, ello no remedia un desarrollo que deja una gran deuda argumentalmente hablando.

Por otro lado, mi percepción es que no se siente que se esté contando una historia potente, pese a tener a la mano todos los condimentos para ello. Se distrae con esbozar algunos detalles en la trama que luego desarrolla a medias y que resultan finalmente en un desperdicio pretencioso. No profundiza o lo hace muy poco cuando tiene la oportunidad y no logra sintonizar con el importante mensaje que quiere brindar, uno sobre la opresión a la mujer y la cultura machista reinante en la sociedad. Resalta, entonces, que está hecho a la medida de lo políticamente correcto que hoy premia Hollywood y no hay un atisbo de rebeldía que nos señale una perspectiva innovadora para enfrentar este tema tan urgente. En ese sentido, se deja llevar por lo artificioso estéticamente y resulta siendo un cascarón vacío por su mala ejecución, pues el fondo no logra ser trascendente si la forma de transmitirlo falla en su forma, en este caso en particular, en lo desprolijo de la construcción del entramado.

Después, siento que no se termina de definir en cuanto a géneros, lo cual no tendría por qué ser nada malo; sin embargo, aquí sí lo es. Apenas si consigue establecerse medianamente como thriller al tener pocas escenas impactantes, al coquetear un poco con el terror y hacer lo mismo con la ciencia ficción. Al no animarse a cruzar la puerta de ninguno, queda como un relato a medias y se siente sin fuerza. Por lo tanto, no causa demasiada sorpresa que muchos sientan que el drama de entretelones protagonizado por Wilde con su elenco resulte más llamativo que la historia propuesta por la cinta en sí misma, lo cual ya resulta cuestionable desde donde se le mire.

Finalmente, tengo la sensación de que la determinación del casting (y por esto me tomé el tiempo de explicar todo el “chisme” hacia el inicio de este reseña) también jugó en contra. Estoy completamente seguro de que esta película hubiera sido menos olvidable con Labeouf en el elenco, ya que a Styles se le nota todavía poco maduro para asumir papeles que le ocupen tanto tiempo en pantalla. No es que sea el típico caso de “debut y despedida” para él, pero está claro que, pese a sus esfuerzos, le ha costado y mucho, pues se le nota poco natural y disforzado en varias escenas. Creo que no es culpable, puesto que es probable que aceptara el reto pensando en crecer profesionalmente. Aun así, mi impresión final es que se buscó a dos figuras de moda (Styles y Pugh) para vender y sacar provecho del lucimiento de ambos, olvidándose de pulir otros aspectos más importantes del filme y tratando de rentabilizar lo máximo posible con el fanatismo que puedan despertar estas dos estrellas.

El veredicto

Recomiendo esta película para quienes quieran disfrutar de la “novedad” de ver a Harry Styles siendo protagonista en pantalla grande al lado de una Florence Pugh que nunca desentona. Considero que, pese a las múltiples críticas señaladas, puede ser disfrutable en la medida que uno se permita solo deleitarse visualmente con la estética de los años 50, derrochada por su gran diseño de producción, sin buscarle mucha explicación ni darle vueltas a la trama. Asimismo, el carisma de Styles, pese a su inexperiencia, podría ser suficiente motivo para quienes, por fanatismo o curiosidad -por los dimes y diretes vertidos previos al estreno-, quieran darle una oportunidad. Si eso no resulta suficiente, la solidez actoral de una Pugh remando contra todo, incluso hasta contra el guion mismo, puede bien valer la pena. Eso sí, es una lástima que la intención política y lo fuerte del mensaje de fondo se termine perdiendo en banalidades por la falta de atrevimiento de la directora, así como la pobreza de sus formas.

¿Sabías que…?

Harry Styles no solo ha ido consolidando su carrera musical internacionalmente en los últimos años, sino que ha tenido incursiones en el cine. La más importante de ellas ha sido en ‘Dunkirk‘ (2017) dirigida por Christopher Nolan. En aquella cinta, fue actor secundario y representó a un soldado británico durante la II Guerra Mundial.

Puedes verla en: Cines

Rating: 3/5

Ficha Técnica

• Directora: Olivia Wilde
• Casting: Florence Pugh, Harry Styles, Olivia Wilde, Gemma Chan, Chris Pine
• Guion: Katie Silberman, Carey Van Dyke, Shane Van Dyke
• Música: John Powell
• Fotografía: Matthew Libatique
• Género: Thriller / Ciencia ficción
• Duración: 122 minutos