Rusia ha perdido en su invasión a gran escala de Ucrania a más de 300.000 soldados, según el último recuento de bajas rusas presentado este martes por el Estado Mayor de Kiev.
“Las pérdidas totales en combate del enemigo entre el 24 de febrero de 2022 y el 31 de octubre de 2023 son, aproximadamente, 300.810 personas”, se lee en el parte ucraniano de hoy.
La cifra supera por primera vez la barrera de los 300.000 después de que Ucrania neutralizara durante la pasada jornada en el campo de batalla a un total de 870 militares rusos, según el cómputo de Kiev.
Aunque estas cifras son a menudo consideradas propaganda de guerra por los expertos, una investigación del medio independiente ruso Verstka revelaba que las autoridades rusas habían pedido certificados de defunción para al menos 230.000 soldados caídos en la guerra.
Según el Estado Mayor ucraniano, Rusia está sufriendo bajas inmensas en su campaña para rodear la localidad de Avdivka, en la provincia oriental de Donetsk.
La batalla por el bastión ucraniano de Avdiivka entró este lunes en su cuarta semana sin que las tropas rusas, que han sufrido miles de bajas, según fuentes ucranianas y occidentales, hayan logrado cercar a los defensores ucranianos, mientras intensifican sus ataques en todo el frente oriental.
Avdiivka, a solo 15 kilómetros de Donetsk, capital y principal plaza fuerte rusa en la región homónima, a juzgar por la intensidad de las acciones militares se ha convertido en el principal objetivo de la tropas de Vladimir Putin, que desde la captura de Bakhmut en mayo pasado no han conseguido ningún avance importante.
Desde el pasado día 10 en la zona de responsabilidad de la agrupación ucraniana Tavria, que incluye Avdiivka, las fuerzas rusas han perdido seis aviones de asalto Su-25, informó el portavoz castrense ucraniano Oleksandr Shtupun.