El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha tildado de “criminal” la entrega de bombas de racimo a Ucrania y ha recalcado que, si bien Moscú “no las ha usado por ahora”, se reserva el derecho a “actuar de forma recíproca” en caso de que Kiev las utilice en el marco de la guerra.
“El uso de bombas de racimo fue descrito como un crimen por la propia Administración estadounidense. Creo que así es como debe ser tratado”, ha manifestado Putin en una entrevista concedida a la cadena de televisión rusa Rossiya 1
“Quiero decir que Rusia tiene suficientes suministros de diversos tipos de municiones de racimo. Hasta ahora no lo hemos hecho, no las hemos usado y no hemos tenido esta necesidad, pese a la bien conocida escasez durante un cierto periodo de tiempo”, ha indicado, según ha recogido la agencia rusa de noticias Interfax.
Así, ha hecho hincapié en que “si las usan (contra las fuerzas rusas)”, Moscú “se reserva el derecho a respuestas de forma recíproca”, antes de argumentar que la entrega de municiones de racimo a Kiev deriva de que “sufren una escasez de municiones, en general”.