Los países occidentales creen que Navalny fue envenenado en Rusia con el agente neurotóxico de la era soviética Novichok en agosto del año pasado. Tras el ataque, el líder opositor fue tratado en Alemania antes de regresar a Rusia.
Occidente sigue presionando al gobierno de Vladimir Putin para que dé explicaciones sobre el envenenamiento del líder opositor Alexei Navalny, quien actualmente se encuentra detenido en una prisión a las afueras de Moscú.
En ese contexto, cuarenta y cinco países, entre ellos Reino Unido, Alemania y Canadá solicitaron este martes al organismo mundial de control de armas químicas que Rusia responda sobre el ataque con agente neurotóxico Novichok contra el activista ruso.
El Gobierno tiene 10 días para responder a las preguntas planteadas por los países, según las normas de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ), con sede en La Haya, según indicaron los delegados.