El Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) confirmó este lunes la presencia de minas en el perímetro de la central nuclear de Zaporiyia, bajo ocupación rusa en el sur de Ucrania.
Las minas las detectaron los expertos de la ONU durante una inspección el domingo y están situadas en una zona restringida entre las barreras perimetrales interna y externa del complejo y, en principio, lejos del alcance del personal de la planta.
“El OIEA ha tenido conocimiento de la colocación de minas fuera del perímetro de las instalaciones y también en lugares concretos del interior. Nuestro equipo ha planteado este hallazgo específico a la central y contestaron que se trata de una decisión militar, y en una zona controlada por militares”, indicó el director general del OIEA, el argentino Rafael Grossi, en un comunicado.
“Tener tales explosivos en el emplazamiento es incoherente con las normas de seguridad del OIEA y las orientaciones sobre seguridad nuclear y crea una presión psicológica adicional sobre el personal de la planta”, criticó el diplomático argentino.
Con todo, la “evaluación inicial” del OIEA, relata Grossi, es que la detonación de estas minas “no debería afectar a los sistemas de seguridad nuclear del emplazamiento”.
El equipo del OIEA ha estado realizando inspecciones y recorridos regulares en la central sin observar hasta ahora ningún equipo militar pesado, señala el comunicado.