Más de 4.800 personas han sido evacuadas en el norte de Filipinas debido al tifón Mawar, que ha perdido fuerza pero aún tiene vientos fuertes.
Se espera que el tifón no toque tierra, pero sus efectos se extienden hasta 770 kilómetros de su centro.
Las autoridades han suspendido vuelos y se han tomado medidas preventivas en las provincias más afectadas.
El tifón se encuentra a 445 kilómetros al este de Cagayan y se desplaza hacia el noroeste a unos 10 kilómetros por hora.
Asimismo, el fenómeno climático se detendría cerca del archipiélago de Batanes antes de dirigirse hacia Taiwán y las islas Ryuku.
Aunque se ha debilitado, todavía se esperan vientos sostenidos de hasta 155 kilómetros por hora y fuertes precipitaciones en algunas áreas.
El tifón previamente afectó a Guam, causando daños significativos.