El asesinato de exguerrilleros es uno de los asuntos más delicados del proceso y, según la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), ha dejado 296 muertos en estos cinco años.
El asesinato de desmovilizados de la antigua guerrilla de las FARC es algo que no debería ocurrir, afirma el consejero presidencial para la Estabilización y la Consolidación, Emilio Archila, quien considera que “un solo muerto es demasiado” cuando se trata de la paz de Colombia.
El funcionario, que lleva sobre sus hombros la difícil tarea de poner en marcha los distintos aspectos del acuerdo de paz firmado el 24 de noviembre de 2016, asegura en una entrevista con EFE que “el objetivo es, y va a seguir siendo, llegar a cero” asesinatos de exguerrilleros.
“La verdad es que ese es un tema complejo. Cuando le explique lo que hemos hecho, lo que hemos logrado, podría pensarse que estoy satisfecho y la respuesta es no. Mientras haya un solo muerto no vamos a estar satisfechos. Un solo muerto es demasiado”, afirma.