Drones rusos de fabricación iraní Shahed-136 alcanzaron este martes por primera vez la ciudad ucraniana de Leópolis, a unos mil kilómetros del frente, donde alcanzaron una “infraestructura crítica importante”.
El alcalde de la ciudad, Andriy Sadovyi, anunció que no se produjeron víctimas y que el edificio sufrió daños “insignificantes”.
Por su parte, el jefe de la administración militar regional, Maksym Kozytskyi, contó que varios pisos del edificio y numerosas ventanas resultaron dañados en el ataque, que causó un incendio.
El tráfico del transporte público local fue temporalmente desviado de la calle en la que se sitúa el cuartel general de los Servicios de Seguridad de Ucrania, pero se reanudó hacia las 10 horas locales.
La zona del ataque está solo a unos cientos de metros del centro histórico, reconocido como patrimonio mundial de la Unesco y es la primera vez que esa zona de la ciudad sufre daños relacionados con un conflicto bélico desde la II Guerra Mundial.