Un grupo de ecologistas activistas pertenecientes al movimiento llamado “Última Generación” ha utilizado pintura de color naranja para rociar la icónica Puerta de Brandeburgo en Berlín, la capital de Alemania, este domingo.
Según un portavoz de la Policía alemana, las seis columnas del monumento resultaron afectadas, y se llevaron a cabo detenciones en el lugar por parte de los agentes policiales, según informó la agencia alemana de noticias DPA.
El grupo “Última Generación” ha afirmado que utilizaron extintores de incendios llenos de pintura de color naranja para llevar a cabo la acción, además de derramar pintura en la Plaza de París, donde se encuentra la Puerta de Brandeburgo.
Como resultado, algunos de los activistas pisaron la pintura y dejaron marcas de colores en el pavimento adoquinado de la plaza. El grupo enfatizó que su protesta tiene como objetivo destacar la necesidad de un cambio político que se aleje de los combustibles fósiles y promueva la justicia ambiental.