Para combatir el déficit, la Sedena invertirá en maquinaria para poder fabricarlos en México.
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) invertirá ocho millones de pesos en adquirir maquinaria y equipo para desarrollar sus propios cohetes aéreos de práctica, llamados Mixcóatl, a fin de “contrarrestar el bajo índice de adiestramiento e incrementar la pericia de los pilotos aviadores al realizar un mayor número de disparos con cohetes aire-tierra”.
Para justificar el gasto, la dependencia indica que la Fuerza Aérea Mexicana (FAM) necesita mil 500 cohetes anuales para entrenar a un estimado de 375 pilotos aviadores, es decir, cuatro por piloto. Sin embargo, el armamento aéreo actualmente se compra en el extranjero porque no existen proveedores en el mercado nacional, lo que resulta muy costoso. Es por eso que sólo se adquiere un cohete al año para las prácticas de cada piloto aviador, lo que además de afectar su adiestramiento incrementa los riesgos en diversas operaciones militares.
El proyecto, que ha sido nombrado “Desarrollo de cohete de práctica aire-tierra y su lanzador de siete bocas Cal. 70 mm. Mixcóatl, segunda fase”, inició el pasado 1 de septiembre y tiene como fecha de término de ejecución el 31 de diciembre de este año. Entre el instrumental que la Sedena adquirirá habrá impresoras 3D para obtener prototipos de plástico que permitan realizar análisis de ensamble y desempeño; estaciones de trabajo y computadoras de escritorio, para modernizar las capacidades de cómputo y obtener resultados precisos en los estudios de ingeniería; y la maquinaria y equipo empleados en la fabricación de las piezas que conforman los prototipos de cohete y lanzador.