Autoridades mexicanas prometieron este sábado que no habrá impunidad y se comprometieron a trabajar para que no se repitan enfrentamientos como el ocurrido el viernes en el central Estado de México, entre pobladores y criminales, que dejó un saldo de 14 muertos, una decena de ellos pertenecientes al grupo criminal la Familia Michoacana.
“Estos hechos no nos paralizan, al contrario, reafirman nuestra determinación de mejorar las condiciones de seguridad en nuestro amado estado, tenga la plena seguridad de que seguiremos trabajando para que hechos como este no se repitan”, afirmó en conferencia de prensa la gobernadora estatal, Delfina Gómez del Campo.
La mandataria local informó que solicitará al Gobierno federal, a través de la Secretaría de la Defensa Nacional, de la de Marina, de la de Seguridad y Protección Nacional, así como a la Guardia Nacional, la “presencia permanente de las fuerzas federales en la región”, para cuidar y proteger a los pobladores.
Las declaraciones de Gómez del Campo se producen apenas horas después del enfrentamiento entre presuntos criminales y pobladores en Texcaltitlán, estado de México, que dejó 14 personas muertas, una decena de ellas integrantes de la Familia Michoacana, además de varios lesionados.
De acuerdo con reportes de la prensa local, el enfrentamiento surgió luego de que los pobladores denunciaran que fueron extorsionados por sujetos que se ostentaban como miembros de la Familia Michoacana, quienes les exigían pagos por cada metro cuadrado de siembra.
Ante esta situación, los habitantes se organizaron para confrontar a los criminales lo que derivó en el enfrentamiento.