Las autoridades de Paraguay confirmaron la muerte de una persona a consecuencia de una fuga de amoniaco producida tras una explosión en una fábrica de embutidos ubicada en la ciudad de San Lorenzo, colindante con la capital, Asunción, y que deja más de una treintena de afectados.
De acuerdo con el gerente de salud del Instituto de Previsión Social (PIS), Carlos Morínigo, la víctima es un joven de apenas 25 años que falleció en la Unidad de Terapia Intensiva (UTI) de un hospital de la zona. Familiares han confirmado a ABC Color que ha muerto por insuficiencia respiratoria.
De las 33 personas afectadas por la fuga de amoniaco, unas 14 están intubadas y se encuentran con pronóstico reservado debido a que presentan problemas respiratorios provocados por inhalación de amoniaco. Los otros 19 se encuentran en mejor estado pero aún no se les declara fuera de peligro.
«El resto de los pacientes están en observación continua porque es traicionero este tema, en un segundo se descompensan. De estos que tenemos en la UTI de Ingavi, dentro de lo crítico están estables, excepto uno que presenta quemaduras en un 80 por ciento del cuerpo, que está en situación muy crítica», ha dicho Morínigo.
Aunque en un primer momento el Ministerio de Medio Ambiente había recomendado evitar circular por la zona, más tarde la directora del Centro Nacional de Toxicología, Nilda Villalba, ha señalado que, con el transcurrir de las horas, el gas se ha disipado, con lo que la zona vuelve a ser segura.
«El gas tiende a caer rápidamente (…) Una vez que se controló la fuga, a esta altura tuvo que haberse disipado y depositado en el suelo, ahí ya no tiene el efecto irritante que tiene cuando lo inhalamos en el aire», explicó Villalba.