La Policía Nacional de Perú confirmó que el líder indígena asháninka, Santiago Contoricón, fue asesinado en su comunidad de Puerto Ocopa en la región selvática de Junín.
Un equipo de homicidios se trasladó a la provincia de Satipo para apoyar la investigación del asesinato, en la que también participan los ministerios de Cultura y Justicia.
Contoricón era líder de su comunidad en una zona perteneciente al Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), la cuenta cocalera más grande de Perú.
Fue alcalde de Río Tambo, consejero regional de Junín, y parte del Comité de Autodefensa de su comunidad.
Luchó por mejorar la seguridad en su área, ya que diversos pueblos del Vraem tienen que convivir con la presencia de narcoterroristas, el remanente de Sendero Luminoso.
En las redes sociales hubo numerosos mensajes de pésame por el asesinato de Contoricón y de protesta por la desprotección estatal de este tipo de figuras, que se enfrentan a grandes peligros por defender su territorio de actividades ilícitas.