La primera dama de Perú, Lilia Paredes, rechazó que la familia presidencial esté involucrada en casos de corrupción y aseguró que su hermana Yenifer, quien esta semana abandonó la prisión en la que cumplía una orden de prisión preventiva por presunta corrupción, trabaja “para la gente que más lo necesita”
“Nosotros no somos delincuentes, como nos califica mucha gente, esa es la pena y la tristeza que me da que hable así la gente”, enfatizó Paredes este jueves en declaraciones a la cadena estatal TVPerú.
La esposa del presidente Pedro Castillo agregó que su hermana, a la que la pareja ha criado como a una hija, “solo se dedicó a hacer su trabajo para la gente que más lo necesita”.
“Es mi hija y siempre voy a estar contenta porque sabemos que ella no ha hecho nada, siempre se ha preocupado por los más necesitados y eso lo que hacemos nosotros cada día”, remarcó al referirse a la liberación de Yenifer.