La organización, que a finales de enero ya advirtió de unos 1.500 desplazados, dijo que la inseguridad está dificultando la ayuda a las comunidades afectadas y que, por ello, se está estudiando la creación de esos corredores para asegurar servicios básicos.
La ONU informó que se está analizando el establecimiento de corredores humanitarios en el departamento colombiano de Arauca (este), donde la violencia ha desplazado a unas 2.240 personas.
La portavoz Eri Kaneko apuntó en una conferencia de prensa que durante el último mes las autoridades han confirmado al menos 62 homicidios en Arauca, donde se registran continuos ataques y choques entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y disidencias de las FARC.
Según la ONU, a ello se suma la violencia contra los civiles y contra las fuerzas armadas colombianas en esta región fronteriza con Venezuela.
Kaneko apuntó que las organizaciones humanitarias han facilitado alimentos a los desplazados, pero dijo que la huida continua de personas y la inseguridad “han limitado la respuesta” y que hay “análisis en curso para establecer corredores humanitarios para asegurar acceso a servicios básicos”.