Miles de brasileños volvieron a las calles para protestar contra el presidente Jair Bolsonaro, que será investigado por la Fiscalía por supuestamente no denunciar sospechas de irregularidades en la negociación de vacunas contra el coronavirus.
Es una nueva jornada de manifestaciones contra el gobierno, que viene enfrentando una presión creciente por una investigación parlamentaria sobre presuntas omisiones la gestión de la pandemia, que ya ha dejado más de 500.000 muertos en Brasil.
Para la médica Patricia de Lima Mendes, que participaba de un acto en el centro de Río de Janeiro, el gobierno es el principal responsable por el alto número de muertes.
“Son más de 500.000 vidas asesinadas por este gobierno, por decisiones espurias, fake news, mentiras, y ahora ese escándalo absurdo de corrupción en relación a las vacunas”, dijo Mendes.
Otras capitales estatales como Belem (Pará, norte), Recife (Pernambuco, noreste) y Maceió (Alagoas) también registraron manifestaciones con pancartas que rezaban “Bolsonaro genocida”, “Impeachment ya” y “Sí a las vacunas”.