La Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie) rechazó este miércoles la disolución del Parlamento ordenada por el presidente del país, el conservador Guillermo Lasso, y alertó sobre los planes privatizadores que aparentemente escondería esa medida conocida como “muerte cruzada”.
El presidente de la Conaie, Leonidas Iza, en una declaración virtual calificó como “un autogolpe de Estado encubierto, apoyado por botas y bayonetas” la declaración de “muerte cruzada”, mecanismo con el que Lasso disolvió la Asamblea Nacional (Parlamento) y llamó a elecciones generales anticipadas.
La medida, aplicada por Lasso bajo la causal de una “grave conmoción interna y política” en el país, apoyada por las Fuerzas Armadas y la Policía, también fue criticada por Iza al asegurar que no existe tal situación y que el decreto, más bien, parecería encubrir una “dictadura disfrazada”.
También tildó de “cobarde” la actitud del jefe del Estado que, según dijo, emitió el decreto de disolución del Parlamento para evitar el juicio político de censura que la misma Cámara llevaba adelante en su contra, con la aprobación de la Corte Constitucional, bajo la acusación de peculado (malversación).
El líder indígena también aseguró que la credibilidad del presidente Lasso es de un 10 %, según encuestas que dijo conocer y que advierten de un amplio rechazo de la población al Gobierno del mandatario conservador.
Insistió en que Lasso ha decretado la “muerte cruzada” también para aprovecharse de que le permite gobernar a través de decretos ejecutivos, por lo que estaría dispuesto a aprobar leyes impopulares como las de privatización, reformas laborales y financieras.