En Colombia volvió a sonar el posible aumento en el precio del galón de ACPM (diésel) para contrarrestar el billonario déficit que tiene el Fondo de Estabilización de Precios de Combustibles (Fepc). Dicho asunto ha sido centro de discusiones entre el Gobierno nacional y representantes del sector de transporte.
Ahora, según declaraciones del viceministro de Transporte, Carlos Eduardo Enríquez, a Valora Analitik, las negociaciones en la actualidad se encuentran en un punto crucial, tras haberse hecho diez reuniones de trabajo y estar pendientes de una undécima convocatoria que hará el Ministerio de Hacienda.
El viceministro expresó que “un posible incremento se podría dar en estos días, para anunciarlo vía decreto en mayo”, lo que dejó claro que la decisión está cerca de ser tomada, pero aún se espera una definición clara.
Carlos Eduardo Enríquez, viceministro de Transporte – crédito Carlos Eduardo Enríquez/Facebook
En el corazón de estas discusiones se encuentra el impacto que un ajuste en el precio del diésel podría tener en el sector transporte, fundamental para la economía del país. Enríquez destacó la importancia de proceder con “prudencia” frente a este tema, debido a las implicaciones que podría tener en los costos operativos de los transportadores y, por ende, en la economía general.
La expectativa es que las conclusiones de estas negociaciones se traduzcan en anuncios oficiales en las próximas semanas, con efectos que se verían reflejados a partir de mayo.
El viceministro hizo hincapié en que “como no nos hemos podido sentar con ellos hemos sido muy prudentes frente al tema”, evidenciando la complejidad de las negociaciones y la cautela con la que se está manejando la situación.
Las mesas de conversación entre el Gobierno y los representantes del sector son un reflejo del esfuerzo colaborativo por encontrar un balance entre las necesidades fiscales del país y los intereses económicos de un sector clave. A lo largo de estas reuniones se ha buscado alcanzar un consenso que permita ajustar el precio del diésel de manera que sea sostenible tanto para el Estado como para los transportadores.