El alcalde de Barranquilla (Colombia), Jaime Pumarejo, dijo que su ciudad está “dando la mano” a los migrantes con “lo poco que tiene”, por lo que pidió a organismos internacionales préstamos más favorables que faciliten la acogida de estas personas.
“Hoy algunos tienen problemas y se les da la mano con lo poco que tenemos. Hemos intentado integrarlos a nuestra comunidad y al sistema de empleo”, explicó en declaraciones durante la primera Cumbre de las Ciudades de Américas, celebrada en Denver (Colorado, EE.UU.).
En algunos foros de esta cumbre, que reunió a más de 200 alcaldes del continente, se puso como ejemplo los programas de acogida de migrantes venezolanos que implementan ciudades como Bogotá o Barranquilla.
El alcalde dijo que la crisis migratoria regional hay que abordarla desde la “empatía” y “entendiendo que todos somos seres humanos”.
El plan de Barranquilla pasa por la integración de los migrantes a la economía local, de modo que no se entiende “como un problema de gasto” sino como una inversión para el empleo y el emprendimiento, dijo Pumarejo.