La decisión fue tomada durante la segunda cumbre por el censo de población y vivienda en Santa Cruz. La huelga se realizaría el 8 y 9 de agosto en rechazo a la postergación de esta consulta para 2024.
A la reunión asistieron unas 362 instituciones, las cuales debatieron sobre las próximas medidas de presión para que se realice la consulta en 2023 y no en 2024. El principal interés por el censo recae en que según sus resultados se determinará la nueva distribución de recursos según población.
Así también, dependerá de eso la asignación de cuotas de representación política en el parlamento. Al final de la reunión se lanzó una resolución al respecto de la fecha de las huelgas y del pedido al presidente de Bolivia, Luis Arce, sobre la fecha de postergación.
El alcalde de Santa Cruz, Jhonny Fernández, no asistió a la reunión al estar en desacuerdo con una nueva huelga. El que sí estuvo presente fue el opositor Luis Fernando Camacho, gobernador de la región. Camacho y otros líderes locales apoyan que se continúe ejerciendo presión para establecer la fecha del censo.