Decenas de compañías chinas estarían operando al norte de La Paz, Bolivia, las 24 horas del día para extraer oro. Estas empresas se estarían ocultando tras cooperativas mineras que reciben dinero de Beijing. De esta manera, estarían extrayendo oro boliviano sin pagar impuestos y tener responsabilidad ambiental.
La investigación publicado por el medio Los Tiempos, con apoyo del Rainforest Journalism Fund del Pulitzer Center revelaría toda una maquinaria montada por China. Según este informe, los trabajos en los campamentos en Mayaya, ubicado en una comunidad en el boque amazónico del norte de La Paz, nunca se detienen.
En ese sentido, el investigador, Sergio Mendoza Reyes, asegura que la actividad minera está envenenado el río Kaka, cuyas aguas llegan al Parque Nacional Madidi. Según Mendoza, los trabajos extractivos de oro son parte de una asociación ilegal que ha destruido la naturaleza en estas poblaciones.
De esta manera, la actividad minera estaría desembocando miles de litros de agua con mercurio y otros contaminantes en el área protegida. Cabe resaltar que el Madidi es uno de las áreas más importantes del mundo en biodiversidad.