La ciudad de Athens se ha visto envuelta en el debate nacional sobre inmigración después del trágico asesinato de Laken Riley, una estudiante de enfermería de 22 años de la UGA.
Durante el fin de semana, la policía arrestó a José Ibarra, de 26 años, como principal sospechoso. Según los investigadores federales, Ibarra es originario de Venezuela y cruzó ilegalmente la frontera sur en 2022. Esto ha llevado a un debate sobre la seguridad fronteriza y las políticas de inmigración.
El representante estadounidense Mike Collins (R-GA 10) ha señalado a los líderes demócratas locales por la situación, afirmando que Athens es una ‘ciudad santuario’. Una ciudad santuario se define comúnmente como una jurisdicción donde las leyes locales pueden servir para proteger a los inmigrantes de la deportación o el procesamiento.
Sin embargo, la alcaldesa, Kelly Girtz, ha negado que sea así. Explicó que el estado ha prohibido estas designaciones y exige que demuestren cada año que no están infringiendo la ley.
En 2019, el ayuntamiento aprobó una resolución que daba la bienvenida a los inmigrantes “de todos los estatus”, pero recientemente se aclaró que esta resolución no obstaculiza la aplicación de la ley y simplemente expresa el deseo de dar la bienvenida a personas de todos los orígenes.