La congresista republicana Marjorie Taylor Green dijo que no renunciará.
“Nunca daré marcha atrás. Nunca me rendiré . Porque soy uno de ustedes” , escribió Greene en su cuenta de Twitter, quien ha sido ampliamente criticada por su apoyo a la teoría de la conspiración QAnon.
Horas antes, un puñado de manifestantes de la sección de Georgia de March For Our Lives se reunió frente a su oficina en Rome para entregar personalmente más de 100.000 firmas pidiendo su destitución. Dijeron que su oficina estaba cerrada.
El congresista demócrata de California, Jimmy Gómez, dijo que tiene la intención de presentar una resolución en la Cámara de Representantes para expulsarla de su cargo el próximo martes.
“El odio no tiene ninguna parte en nuestra Cámara de Representantes, en nuestro país y en los cargos públicos”, dijo la manifestante Mina Turabi.
En las redes sociales, Greene ha promovido numerosas teorías de conspiración infundadas, incluida una publicación que sugería que los líderes del Partido Demócrata deberían ser ejecutados y que los tiroteos en las escuelas de Sandy Hook y Parkland eran “banderas falsas”.
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