La actriz norteamericana se refirió a esto a través de un comunicado público, donde aseguró que la prioridad de ambos es el bienestar de sus hijos.
“Es con mucho cuidado y consideración que hemos tomado la difícil decisión de divorciarnos. Hemos disfrutado tantos años maravillosos juntos y estamos avanzando con profundo amor, amabilidad y respeto mutuo por todo lo que hemos creado juntos”, expuso.
“Nuestra mayor prioridad es nuestro hijo y toda nuestra familia mientras navegamos por este próximo capítulo. Estos asuntos nunca son fáciles y son extremadamente personales. Realmente apreciamos el respeto de todos por la privacidad de nuestra familia en este momento”, agregó.