Desde parejas, amistades hasta incluso con sus amadas mascotas, millones de personas celebran el 14 de febrero en compañía de quienes más aprecian. Alrededor del mundo, esta fecha es reconocida por el romanticismo, el agradecimiento y la amistad, por lo que sin lugar a dudas resulta la ocasión ideal para dar un regalo, dedicar una canción o salir a cenar.
Si aún no sabes qué palabras dedicarle a esa persona especial en esta icónica fecha, te presentamos las mejores frases y poemas para dedicar este 14 de febrero.
Definitivamente encontrar las palabras adecuadas en el momento preciso resulta complicado. Por ello, te ofrecemos una lista de poemas que puedes dedicar. Eso sí, será necesario que pongas de tu parte para que estas líneas puedan considerarse como una dedicatoria y esa persona pueda sentirse realmente especial.
Amor constante más allá de la muerte, Quevedo
Cerrar podrá mis ojos la postrera
Sombra que me llevare el blanco día,
Y podrá desatar esta alma mía
Hora, a su afán ansioso lisonjera;
Mas no de esotra parte en la ribera
Dejará la memoria, en donde ardía:
Nadar sabe mi llama el agua fría,
Y perder el respeto a ley severa.
Alma, a quien todo un Dios prisión ha sido,
Venas, que humor a tanto fuego han dado,
Médulas, que han gloriosamente ardido,
Su cuerpo dejará, no su cuidado;
Serán ceniza, mas tendrá sentido;
Polvo serán, mas polvo enamorado.
Hagamos un trato, de Mario Benedetti
Compañera
usted sabe que
puede contar
conmigo
no hasta dos
o hasta diez
sino contar
conmigo
si alguna vez
advierte
que la miro a los ojos
y una veta de amor
reconoce en los míos
no alerte sus fusiles
ni piense qué delirio
a pesar de la veta
o tal vez porque existe
usted puede contar
conmigo
si otras veces
me encuentra
huraño sin motivo
no piense qué flojera
igual puede contar
conmigo
pero hagamos un trato
yo quisiera contar
con usted
es tan lindo
saber que usted existe
uno se siente vivo
y cuando digo esto
quiero decir contar
aunque sea hasta dos
aunque sea hasta cinco
no ya para que acuda
presurosa en mi auxilio
sino para saber
a ciencia cierta
que usted sabe que puede
contar conmigo.
Despedida, de Jorge Luis Borges
Entre mi amor y yo han de levantarse
trescientas noches como trescientas paredes
y el mar será una magia entre nosotros.
No habrá sino recuerdos.
Oh tardes merecidas por la pena,
noches esperanzadas de mirarte,
campos de mi camino, firmamento
que estoy viendo y perdiendo…
Definitiva como un mármol
entristecerá tu ausencia otras tardes.