Luego de que Danelo Cavalcante lograra eludir a las autoridades penitenciarias para escaparse de la prisión del condado de Chester, en Pensilvania, los oficiales se han centrado en evaluar los errores que facilitaron la huida del asesino de nacionalidad brasileña.
Y es que, esta no es la primera vez que un hecho de este tipo se registra en esta prisión, otro recluso identificado como Igor Bolte escapó dos veces de la misma cárcel.
La primera vez fue en julio de 2019, cuando Bolte, que cumplía una condena por agresión agravada, salió de un centro de liberación laboral en la cárcel, “escaló una valla de seguridad y huyó a pie”, según una declaración jurada. Lo encontraron temprano a la mañana siguiente, aproximadamente a una milla y media de la cárcel, reportó el medio estadounidense The New York Times.
En mayo pasado, Bolte, que ahora tiene 30 años y está detenido por violar su libertad condicional, salió de nuevo, trepando las paredes junto al patio de ejercicios (más tarde le dijo a un detective de la policía que “era un escalador”) y luego corrió a través del techo y bajó por la entrada de visitantes. Fue capturado a los pocos minutos, de acuerdo con el NYT.
Estas dos fugas del mismo preso, sumadas a las de Cavalcante ha preocupado a las autoridades de la prisión del condado de Chester.
El fallo clave en la fuga de la semana pasada, se debió a que un oficial en la torre, quien es el encargado de vigilar a los reclusos en el patio de ejercicios, no se percató de la ausencia de Cavalcante, dijo al New York Times Howard Holland, el director interino que supervisa la cárcel.