Paul Whelan, un ciudadano estadounidense que fue condenado en Rusia por cargos de espionaje y que siempre se ha considerado a sí mismo como un rehén político, ha aparecido en un video después de tres años por primera vez.
Detenido en Moscú en 2018 mientras asistía a la boda de un amigo, Whelan, un ex marine de Estados Unidos, fue sentenciado a 16 años de prisión después de un juicio que se llevó a cabo a puertas cerradas.
El gobierno de Estados Unidos ha catalogado la detención de Whelan como “injusta”.
El video fue grabado en un campo de trabajo y fue transmitido por el canal RT, que está respaldado por el Kremlin. Para su familia, en Estados Unidos y Canadá, es la primera vez que lo ven desde junio de 2020, cuando la BBC filmó su última comparecencia ante un tribunal de Moscú.