El servicio de agua de West Virginia mejora su proceso de tratamiento tras el descarrilamiento de un tren en East Palestine, Ohio. El accidente ferroviario provocó que los funcionarios quemaran cloruro de vinilo en cinco vagones cisterna en un intento de eliminar el químico tóxico en un entorno controlado.
El incidente ha llevado a una empresa de servicios públicos de agua en lugares tan lejanos como West Virginia a tomar medidas adicionales. Las precauciones se han elevado a medida que aumentan los problemas de salud. Aproximadamente 50 vagones, incluidos 10 que transportaban materiales peligrosos, descarrilaron el 3 de febrero en la aldea de East Palestine en Ohio. Nadie resultó herido en el descarrilamiento que, según los investigadores, fue causado por un eje roto.
West Virginia American Water dijo el domingo que esta mejorando su proceso de tratamiento de agua como medida de precaución. Las medidas se tomaron tras el descarrilamiento de un tren que transportaba productos químicos que esparció una columna tóxica en East Palestine, Ohio, cerca de la frontera con Pensilvania. La empresa de agua también instalará una toma secundaria en el río Guyandotte en caso de que sea necesario cambiar a una fuente de agua alternativa.
El alcalde de Palestina Oriental, Trent Conaway, dijo que todos los productos químicos en llamas se han apagado por completo. No obstante, declaró que continúa un “proyecto de limpieza masivo” con camiones cisterna y tanques portátiles. Funcionarios de la Agencia de Protección Ambiental de EE. UU. y Ohio están monitoreando el situación diaria, dijo.