La decimoquinta fue la vencida. Por primera vez en la historia del grupo de Operaciones Bélicas Especiales de la Armada de Estados Unidos, una mujer se integra al escuadrón.
Antes de ella, las catorce mujeres que intentaron culminar un rigurosísimo curso de 37 semanas fallaron. Pero la racha se quebró con una marina cuya identidad es por ahora desconocida.
Esta mujer pionera se ha graduado junto a 16 compañeros varones, cifra que se entiende mejor con el contexto: aproximadamente 35% de los hombres y mujeres que postulan a dicho grupo de élite logran graduarse.
Se trata de un hito en la historia de la participación femenina en las Fuerzas Armadas de Estados Unidos. La agencia AP recuerda que recién han pasado cinco años desde que “todos los puestos de combate” se abrieran para ambos sexos.
La historia de casos de éxito podría aumentar en las próximas semanas: tres mujeres están llevando el entrenamiento, una para integrar grupo de Operaciones Bélicas Especiales, y dos para la fuerza especial SEAL.