La infraestructura del Parque Nacional de Yellowstone, que inició de manera natural para luego moldearlo, de manera que los turistas pudiesen visitarlo, incluso en automóviles, fue destruida por las graves inundaciones.
Las fuertes lluvias y el rápido derretimiento de nieve provocaron la inundación del parque y sus comunidades aledañas. Estas inundaciones ahogaron casas, derribaron puentes y destruyeron carreteras.
“El paisaje, literal y figurativamente, ha cambiado dramáticamente en las últimas 36 horas”, afirmó Bill Berg, comisionado en el cercano condado de Park. “Es un poco irónico que este paisaje espectacular haya sido creado por eventos geológicos e hidrológicos violentos, y no es muy útil cuando sucede mientras todos estamos aquí asentados en él”.
El parque nacional más antiguo del país tuvo que evacuar a sus visitantes y cerrar sus puertas como medida de prevención ante las fuertes inundaciones.