Analysia Beck, una madre de Wisconsin, solía estremecerse cuando leía historias sobre bebés que nacían en lugares insólitos.
“Era mi peor pesadilla”, contó a TODAY.com la joven de 25 años. Entonces dio a luz en el estacionamiento de un McDonald’s. “Todavía estoy en estado de shock”, señaló Beck, mientras su marido, Daniel, se reía.
Alrededor de las 11:00 pm del 11 de enero, Beck, embarazada de 38 semanas, rememoró que empezó a tener ligeras contracciones. Al principio, no se preocupó y creyó que se trataban de tipo Braxton Hicks, también conocidas como de falso parto. La joven volvió a dormirse, pero se despertó sobresaltada por un fuerte dolor. Momentos después, su fuente se rompió.
La pareja salió por la puerta de su casa en cuanto llegó la madre de Beck para cuidar de sus hijos Jayce, de 3 años, y Aubriella, de 17 meses. Analysia bromeó diciendo que nunca había visto a Daniel conducir su automóvil tan rápido.
“Llevábamos como dos minutos en el coche cuando le dije: ‘Daniel, tienes que parar, siento que estoy sentada sobre la cabeza del bebé’”, dijo Beck. “En ese momento, supe que venía y que no íbamos a llegar al hospital”.
Daniel se detuvo en el estacionamiento de un McDonald’s y llamó al 911, mientras ella se metía en la parte trasera de su vehículo. Eran las 03:55 am y nevaba con fuerza.
“Empujé tres veces y salió”, apuntó Beck. “Los paramédicos apenas llegaron, pero estaban allí para ayudarla”.
Lo primero que notó Beck fue que el recién nacido estaba azul.
“Creo que fue por el frío que hacía: la nieve entraba en el coche y le cayó en la cara”, añadió. “Por suerte, estaba sano y todo salió bien. Pasó todas las pruebas en el hospital”.
La pareja eligió el nombre de Micah para su bebé de 5.5 libras (2.5 kilogramos). Pero desde ese día le llaman “Pequeño McFlurry”, por el famoso postre helado de la cadena de comida rápida.
“Entre la viento y el McDonald’s, ¡creemos que es muy apropiado!”. agregó Analysia.