Esta semana finalizó el juicio contra Nikolas Cruz, quien asesinó a tiros a 17 personas el 14 de febrero de 2018. El jurado estuvo compuesto por 12 personas, 5 mujeres y 7 hombres, quienes escucharon por tres meses los argumentos de la fiscalía y de la defensa del autor de la masacre.
En lo que respecto a la culpabilidad de Cruz, nunca hubo duda sobre la autoría dado la cantidad de material audiovisual e incluso la propia confesión del joven. Sin embargo, el jurado tomó importancia a la hora de decidir cual sería la sentencia que se le otorgaría al asesino. Finalmente, se descartó la pena de muerte y el jurado concordó con la defensa sobre la cadena perpetua.
Si bien la identidad y el voto de los miembros del jurado se mantiene en anonimato, trascendió que al menos tres querían la pena de muerte y dos estaban en dudas. Sin embargo, una de las jurados se habría comunicado con la oficina del fiscal, Michael Santz, para denunciar una probable amenaza de parte de otro miembro del jurado.
Inmediatamente, la fiscalía solicitó que la policía interrogue a la denunciante para esclarecer si hubo un delito o no. Además, otro miembro mandó una carta, al juez asegurando que luego de anunciar que votaría por la cadena perpetua se presentaron momentos tensos. Cabe recordar que solo en caso todo el jurado hubiera votado en unanimidad por la pena de muerte esta hubiera procedido.