David DePape, el hombre que atacó con un martillo a Paul Pelosi, esposo de la expresidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, dijo en el juicio en su contra que quería acabar con la corrupción en Washington.
Aseguró, mientras lloraba, que se acercó a la casa de Pelosi en San Francisco (California) para lograr que la política confesara su supuesta participación en una trama de corrupción.
Según la página web de Politico, el acusado tenía el plan de ingresar a la residencia disfrazado de unicornio, retener a la expresidenta de la Cámara de Representantes y someterla hasta que dijera lo que él quería escuchar. De lo contrario, había ideado romperle las rodillas con un martillo.
Sin embargo, cuando intentó ejecutar sus pensamientos las cosas no salieron como lo esperaba: en ese momento, la política estaba fuera de la ciudad, por lo que el canadiense terminó golpeando a Paul Pelosi en la cabeza.
David DePape se declaró no culpable de intento de asesinato y dijo que golpeó al esposo de Pelosi cuando se dio cuenta de que su plan te estaba “desmoronando”, según señaló CNN. “Él nunca fue mi objetivo y lamento que resultara herido”, manifestó el acusado.