Un equipo especial de armas y tácticas del FBI ha realizado una incursión en un motel situado en el sur de California, en Estados Unidos, donde llevaron a cabo el rescate de un joven de 17 años que había sido secuestrado y retenido para exigir un rescate.
Durante la operación, que tuvo lugar en Santa María, se logró la detención de tres individuos, y es relevante destacar que no se efectuaron disparos en el proceso, según lo informado por la CNN. Los tres detenidos enfrentan cargos de secuestro.
El secuestro es un delito que conlleva una pena máxima legal de cadena perpetua, de acuerdo con un comunicado emitido por la Fiscalía Federal para el Distrito Central de California.
Según la denuncia penal, los hechos ocurrieron el pasado lunes en Highland, California, cuando un residente escuchó un fuerte ruido fuera de su domicilio y posteriormente revisó las imágenes captadas por la cámara de seguridad de su casa. En dichas imágenes, se pudo observar a dos individuos sacando a la víctima de su vehículo para luego introducirla en un Jeep Grand Cherokee de color plateado.