Estados Unidos ha pedido moderación a China tras las maniobras militares desplegadas en torno a Taiwán.
Un portavoz del Departamento de Estado ha señalado que están “monitoreando” las maniobras desplegadas por Pekín en respuesta a la reunión entre la presidenta taiwanesa Tsai Ing-wen y el presidente de la Cámara de Representantes de EE.UU, Kevin McCarthy.
Además, el gobierno de Joe Biden ha asegurado que cuenta con los recursos y capacidades suficientes para garantizar la paz y la estabilidad en la región.
El Ejército chino ha calificado las maniobras como una “seria advertencia” contra “la provocación de las fuerzas separatistas”.
Las maniobras incluyeron el despliegue de “cohetes, misiles convencionales, navíos y aviones”.
La isla de Taiwán, que Pekín considera una provincia rebelde, es uno de los mayores motivos de conflicto entre China y Estados Unidos, debido a que Washington es el principal suministrador de armas de Taiwán y sería su mayor aliado militar en caso de conflicto bélico.