El Gobierno del presidente Joe Biden analiza una prohibición federal de los cigarros mentolados, un producto de alto consumo entre fumadores hispanos y afroamericanos, y que preocupa a organizaciones médicas.
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) ha estado sopesando por años la veda de la producción y venta de cigarros mentolados, cuyo anuncio está previsto para este mes.
Más del 70 por ciento de los fumadores afroamericanos y del 51 por ciento de los latinos consumen cigarros mentolados, en comparación con el 39 por ciento de los adictos blancos, según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos.
“Los cigarrillos mentolados son populares entre los afroamericanos y los hispanos“, dijo en una entrevista Bonnie Halpern Felsher, profesora de Pediatría en la Escuela de Medicina de la Universidad Stanford, en California.
“El mentol hace más atractivo el fumar, es refrescante, y el empaquetamiento y la publicidad apuntan a las minorías”, añadió.
Elena Ríos, directora ejecutiva de la Asociación Nacional Médica Hispana, advirtió de que “el mentol, de hecho, incrementa la adicción y hace más difícil la cesación de fumar”.
Ríos explicó en una entrevista que los cigarrillos mentolados, “al igual que otros productos con sabores distintos, atraen a la gente joven y a las mujeres”.
La proporción de fumadores entre la población de Estados Unidos cayó del 42.4 por ciento en 1965 al 12.5 por ciento en 2020, según los CDC, pero ese dato tiene variaciones raciales y étnicas.