La cámara alta del congreso votó a favor de continuar con el proyecto sobre el apoyo a la industria de los semiconductores. Se espera que con esta legislatura se pueda aumentar la fabricación de microchips en el país para competir con China.
La ley también es una respuesta a la escasez de estos productos que ha significado una traba para varias industrias. La producción automovilista, la electrónica y hasta las armas de alta tecnología se ha visto afectada por la carencia de microchips. La escasez respondería a las consecuencias del COVID-19, las tensiones entre Estados Unidos y China, y a factores climáticos.
Con la ley se espera proporcionar hasta $54 millones en subsidios y créditos fiscales para las empresas productoras de esta tecnología. Se estima que el crédito tendría un valor de $24 mil millones y estaría enfocado en la construcción de plantas de producción en territorio estadounidense.
La ley entraría en debate para luego ser aprobada en el mismo senado y luego esperar la aprobación de la Cámara de Representantes. La administración Biden apoya la iniciativa, por lo que han estado instando a los congresistas a votar a favor. El gobierno considera que la ley significa una cuestión clave para la economía y la seguridad nacional, sobre todo por el domino chino en la industria. Además, significaría un factor de creación y preservación de empleos en el país.