El presidente Joe Biden firmó una orden ejecutiva que busca reformar las fuerzas de seguridad del país. Es decir, obligará a los cuerpos policiales a revisar sus protocolos de uso de la fuerza.
Durante la firma estuvieron presentes familiares de George Floyd, quien murió hace justo dos años asfixiado por el agente que le arrestaba, y de Breonna Taylor, quien falleció por disparos de la Policía durante una redada en su casa en marzo de 2020.
La orden ejecutiva llega después de que el Senado estadounidense rechazase el Acta de Justicia Policial George Floyd, una propuesta de reforma policial del Partido Demócrata que no consiguió el apoyo de los legisladores republicanos.