La victoria del Inter de Milan sobre la Roma (3-1) en el clásico de ayer no trajo solo felicidad, sino que hubo una polémica desatada que se llevó todos los reflectores cuando hubo un supuesto enfrentamiento verbal entre el técnico italiano y el delantero argentino.
Resulta que Martínez había sido mandado al banquillo desde el arranque a causa de la seguidilla de partidos en la recta final. Por lo tanto, en su reemplazo, había partido el chileno Alexis Sánchez en la delantera. No obstante, ‘El Niño Maravilla’ cayó lesionado a los 35′ y Conte llamó al el ex Racing Club de Argentina para que cubriera la posición de su compañero.
El Inter estaba ganando parcialmente por 2-1, pero los ataques romanos eran constantes y amenazaban con alcanzar el empate pronto. ‘El Toro’ era de los que más buscaba el gol, pero se vio sorprendido cuando el entrenador interista lo llamó para que sea cambiado por Andrea Pinamonti, joven atacante que apenas ha tenido minutos en la temporada.
El argentino no lo podía creer, ya que corría el 78′ y apenas había disputado 40 minutos desde su ingreso. Al marcharse del campo, desató su rabia y disconformidad, pues emitió varios improperios hacia Conte, tiró su camiseta con violencia sobre el gramado y hasta pateó una botella que casi golpea a un compañero. Todo ello desató rumores sobre una posible rencilla entre jugador y entrenador.
En los entrenamientos de este jueves por la mañana, ambos zanjaron sus diferencias de una divertida manera para acallar las “malas lenguas”. El plantel armó un ring improvisado con algunas cuerdas y les entregó a los dos unos guantes de boxeo. Romelo Lukaku, quien se encuentra de cumpleaños, fue el mediador y simuló presentar un combate entre ellos ante las risas y aplausos de todos.
Finalmente, todo terminó en una broma y la paródica escena sirvió para limar asperezas entre entrenador y jugador.