El atacante alemán se ha convertido casi sin quererlo en uno de los señalados en esta discreta temporada, especialmente en su final, de la escuadra alemana.
A la espera de saber cómo se resuelve finalmente la Bundesliga, pinta que este verano se vivirán muchos cambios en el seno del Bayern Múnich. Con Thomas Tuchel a los mandos, marcará la preparación de la siguiente temporada porque el técnico es claramente líder en la toma de este tipo de decisiones y en la planificación.
Por eso llevamos muchos días ya con bastantes rumores e informaciones que rodean a la escuadra alemana. Y entre ellos las salidas de algunos jugadores importantes del plantel que deberían dejar su espacio a otros futbolistas más. De manera que el combinado del Allianz Arena ya baraja una extensa lista de interesantes objetivos.
Pero entre esos jugadores que pueden cambiar de aires actualmente tenemos a Thomas Müller. Autor de 7 goles y 10 asistencias en 36 partidos de la presente temporada, el germano ha sido pieza clave del combinado germano en las últimas campañas. Un futbolista esencial desde hace más de una década en un club donde a sus 33 años es toda una leyenda.
Ese futbolista que, sin grandes condiciones aparentes, ha logrado siempre marcar las diferencias por su tesón y cualidades ofensivas, es noticia casi de forma constante este mes. Porque es uno de los que están en la rampa de salida del club. Un jugador que además viene de completar hasta la fecha su campaña más “discreta”, dentro de que ha sido una estrella de altísimo nivel.