El tifón, que tocó tierra el 16 de diciembre con ráfagas de viento de hasta 240 kilómetros por hora, cruzó de este a oeste por unas nueve islas del país y afectó a más de 4,2 millones de personas.
Al menos 397 personas han muerto y 83 permanecen desaparecidas en Filipinas debido al devastador tifón Rai que golpeó el archipiélago hace dos semanas, conforme a la actualización este martes de las cifras oficiales.
El tifón dejó un rastro de destrucción durante su trayecto sobre el archipiélago y causó daños en viviendas, infraestructuras y cultivos agrícolas valorados en 22.000 millones de pesos filipinos (más de 437 millones de dólares).
El Consejo Nacional de Gestión y Reducción del Riesgo de Desastres (NDRRMC), que verifica y corrobora los datos de las diferentes agencias sobre el terreno, además señaló que 1.147 personas resultaron heridas y casi 561.500 fueron desplazadas.
Más de la mitad de los desplazados se encuentran en alguno de los 1.200 centros de evacuación auspiciados por las autoridades, donde se teme que la masificación de las instalaciones pueda derivar en grandes brotes de Covid-19.