La iniciativa denominada AUKUS es una nueva pieza “histórica” en el creciente enfoque de Estados Unidos en la región, donde China está desafiando décadas de liderazgo y dominio naval de Washington.
Estados Unidos anunció una nueva alianza con Australia y Reino Unido para fortalecer las capacidades navales en la región Indo-Pacífico, con una nueva flota australiana de submarinos nucleares.
El anuncio, realizado en una videoconferencia por el presidente Joe Biden, el primer ministro australiano Scott Morrison y su homólogo británico Boris Johnson, seguramente no caerá bien en Francia, que ha estado negociando una venta multimillonaria de submarinos convencionales a Australia.
La empresa de defensa Naval Group con sede en Francia expresó su “profunda decepción” por la noticia de la iniciativa que pareció dejar de lado el acuerdo franco-australiano.
Biden dijo que los esfuerzos para permitir que Australia construya submarinos de propulsión nuclear garantizarán que tengan “las capacidades más modernas que necesitamos para maniobrar y defendernos contra amenazas en rápida evolución”.