La declaración del mandatario brasileño se da después de un durísimo informe presentado por el Senado sobre la pandemia en Brasil, que concluyó que su “decisión política” agravó la crisis y lo acusó de “crímenes contra la humanidad”.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, reafirmó que, en lo que depende del Ejecutivo, la vacuna contra el Covid-19 no será obligatoria, ni el Gobierno promulgará la exigencia de un pasaporte sanitario como el que pretenden implementar estados y municipios.
“En lo que depende del Gobierno federal la vacuna no será obligatoria y no tendremos pasaporte sanitario. La libertad debe estar encima de todo”, manifestó una vez más Bolsonaro durante la transmisión semanal de su programa en vivo a través de las redes sociales.
Sin profundizar ni dar detalles, Bolsonaro citó, incluso, que el 70% de las muertes por Covid-19 en los últimos días en el Reino Unido, donde se aceleró nuevamente la pandemia, corresponden a personas vacunadas y defendió, como es habitual, tratamientos con medicamentos sin comprobación científica contra el coronavirus.