La Visión recomienda: ‘Todo a la vez en todas partes’ (2022)

Créditos: Difusión

Cuando una ruptura interdimensional altera la realidad, una inmigrante china en Estados Unidos se ve envuelta en una aventura salvaje en la que solo ella puede salvar el mundo.

Everything everywhere all at once‘ (‘Todo a la vez en todas partes‘) se estrenó en el 2022 y rápidamente se estableció como una de las películas favoritas de la crítica especializada, pero, más que nada, de la audiencia. La conmoción generada por su sorprendente éxito -aunque no necesariamente triunfo en taquilla- fue justificada y superada de algún modo tras convertirse en la cinta más nominada a los Premios Oscar 2023. Afirmo esto porque no creo que nadie se hubiera imaginado -ni en sus mejores sueños- que este loco proyecto de la distribuidora A24 se alzaría con nada menos que 11 nominaciones, incluyendo el galardón de Mejor Película. De esta manera, la producción dirigida por “Los Daniels”, Dan Kwan y Daniel Scheinert, ha rebasado toda expectativa y ha vuelto a colocarse inevitablemente en el radar mundial como el outsider que amenaza con arrasar con los premios más preciados de Hollywood.

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La trama nos cuenta la historia de una mujer china-americana, dueña de una lavandería, quien se encuentra -junto a su familia- ahogada en una serie de problemas rutinarios que conforman la monotonía de sus días. Sin embargo, llegado el momento, descubre que es la única elegida en todo el mundo para conectarse con universos paralelos y tratar de evitar la destrucción del multiverso. Este llamado a convertirse en la heroína le llevará a enfrentarse no solamente a una villana que le conoce muy bien, sino que también se convertirá en una feroz lucha consigo misma para derrotar a los demonios de su pasado, aquellos que le han atormentado durante tantos años y que no le han permitido tener una vida feliz. Tan grande responsabilidad le llevará a viajar a diferentes mundos y cuestionarse sobre las decisiones que tomó a lo largo de su existencia para llegar hasta donde está.

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Lo destacable

Si es que hay alguna película que ha sabido plasmar bien el concepto de multiverso es esta. Al respecto, creo que todo parte del buen trabajo en el guion escrito por “Los Daniels”, quienes supieron sentar la historia perfecta para comunicar un mensaje esperanzador entre tanto desorden que encontramos en la película. Porque, si vamos a hablar de multiversos, tenemos que hablar sobre lo desordenado que puede ser visitar diferentes mundos y experimentar situaciones descabelladas por montones. Es un viaje loco que parece no tener sentido, pero, justamente en su sinsentido, es que guarda su moraleja sobre lo importante de vincularnos verdaderamente con las personas que más queremos y valorarlas antes de que sea demasiado tarde. En todo caso, manejar los hilos de tantas subtramas puede llegar a ser un verdadero reto, pero sí que consiguen hacer real y cercana la inmersión a este multiverso, el cual nos invita a ser testigos de los hechos quizás más delirantes que hayamos visto alguna vez en el cine.

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Sucede que no solo se trata de lo ficcional que pueda resultar la simple premisa de viajar a otros universos, sino que hay diferentes géneros que convergen entre sí para estructurar la obra de tal forma que parezcan varias películas en una sola. Hay mucho drama familiar, hay comedia llevada hasta el absurdo, momentos muy marcados de terror y hasta escenas de acción con coreografía incluida. Puede que, en principio, la trama parezca estar estructurada sobre la típica lucha del bien frente al mal (el Ying y el Yang), pero es más complejo que ello. En algún punto, en medio de todo el absurdo y demás distracciones, es posible encontrar un momento de lucidez en el que uno conecta con la narrativa y se siente conmovido a través de un tema tan universal como el amor, no solamente hacia nuestros seres queridos, sino también a nosotros mismos.

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El entramado brilla por sí mismo, pero son los protagonistas de la historia los que consiguen convencernos de los acontecimientos. Por un lado, tenemos a la actriz Michelle Yeoh como el personaje principal (Evelyn Wang), quien es la elegida para salvar el mundo ante su inminente destrucción. Sobre ella descansa gran parte del argumento y es de su capacidad transformativa de lo que todos hablan. Yeoh, en gran parte de su larga trayectoria, participó en películas de acción y conquistó este género, pero verla moverse por el drama y la comedia de una manera tan natural es lo que ha confirmado su versatilidad como actriz y le ha hecho llevarse los aplausos. Su capacidad camaleónica al transformarse en cada salto entre mundos y adaptarse a cada situación es uno de los puntos fuertes que uno no puede dejar de alabar.

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No obstante, quien se convirtiera en mi personaje favorito es el esposo de la protagonista, encarnado por el actor Ke Huy Quan (Waymond Wang). Su performance es visceral y sumamente conmovedora dentro del arco dramático de la cinta, sin dejar de mencionar que es tremendamente divertido cuando le toca serlo. Creo que consigue empalmar una actuación perfecta a pesar de no tener un rol protagónico y destila una empatía intrínseca que pocos histriones tienen, pues su carisma atrae tanto la tristeza como la alegría. Por supuesto, también puede pasar de ser galán exitoso a convertirse en un hombre fracasado y sin amor, según lo requiera la trama, y es sensacional notar cómo esta transformación a veces puede ser notada simplemente por algún cambio de expresión en su rostro o alguna peculiaridad mínima. Sin duda, para mí es quien concreta la actuación más convincente de todas.

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En la parte técnica, creo que no hay nada que discutir. La edición es prácticamente perfecta, pues conseguir conjugar tantos saltos entre universos es digno de una tarea titánica, sobre todo teniendo en cuenta el poco presupuesto que destinó a aspectos como los efectos especiales, los cuales tampoco fallan y están totalmente a la altura. A esto hay que sumarle el increíble trabajo de vestuario y maquillaje hecho en cada uno de los personajes, sobre todo cuando hay secuencias en las algunos cambian su vestimenta en segundos dentro de una misma toma y uno puede sentir como cada atuendo se convierte en parte de lo que quiere expresar el protagonista en aquel momento. Por último, la conjunción de estéticas propuestas a partir de la fotografía es de una belleza inapelable, tanto en las tomas donde hay acción como en las que simplemente hay objetos inanimados, donde en todas los colores escogidos también forman parte de la locura que se quiere plasmar.

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Lo cuestionable

Si tuviera que describir la película con un adjetivo sería “caótica”. La historia comienza un poco lenta, pero poco a poco comienza a ganar en velocidad hasta convertirse en un bombardeo constante de imágenes que puede llegar a ser insoportable para algunos. En efecto, ocurre una avalancha imparable de sucesos, unos tras otros, que puede resultar siendo demasiado por procesar en tan poco tiempo. En consecuencia, es muy fácil perder el hilo y creer que, simplemente, lo que estamos viendo no tiene mucho sentido como para tomarle atención o que es injustificablemente intolerable. Esto puede traducirse en una sensación asfixiante y nada agradable si no estamos preparados para ello, ya que, literalmente, vemos como todo sucede a la vez y al mismo tiempo, y a una velocidad irrefrenable.

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Logra ser impactante, de todas maneras, pero no sé si por todas las razones necesarias. Hay momentos en que, por ejemplo, el absurdo supera límites delirantes y se pierde cualquier sentido de conexión con la verosimilitud de la trama, por más ciencia ficción que sea. Debo admitir que en un principio puede resultar ingenioso y conseguir robar alguna que otra sonrisa, pero después poco a poco se va acabando la sensación de asombro a tal punto de que ya nada parece del todo inesperado y uno simplemente quiere saber cómo termina la historia sin tanto rodeo. Asimismo, el uso de un humor ridículo para meter al espectador en la trama también puede terminar siendo cansino y haciendo que uno desconecte sin más de lo que está pasando.

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Por otra parte, no pude evitar sentir que estaba ante un conjunto de pastiches bien articulados, sobre todo porque hay numerosos guiños a películas famosas como ‘Matrix’ (1999) y ‘Ratatouille’ (2007), por mencionar algunas. Estas referencias en cierto punto llegan a ser graciosas, pero luego se tornan desgastantes y se siente que se emplea mucho metraje en ellas, por más que tal vez sea a forma de homenaje. Sea como fuere, en algún punto uno puede llegar a sentir que están sucediendo muchos eventos, pero no todo acontecimiento que observa es sustancial. Pese a que esto es parte del sinsentido que se propone, quizás se pudo haber recortado algunas escenas que más que aportar al entramado generan confusión y desvían la atención.

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El veredicto

Recomiendo esta película para todo público que quiera disfrutar de una historia original, loca y divertida. Estamos ante una obra que superficialmente puede parecer una oda al absurdo, pero que contiene un poderoso mensaje sobre abrir tanto los ojos como el corazón hacia las personas que queremos y a nuestros sueños. El paseo caótico en el que nos sumerge es solo la excusa para hacernos llorar y reír de un momento a otro, una y otra vez, hasta quedar agotados emocionalmente. Lo quiere hacer todo abrumadoramente a la vez y es una apuesta arriesgada que toca a cada uno de una forma diferente, según cómo conectemos con ella, generando una mezcla de sentimientos poco común en el cine actual. Finalmente, habrá quien se sienta reflejado o no, pero no es de las cintas que te deja indiferente, pues todos nos hemos sentido derrotados al menos alguna vez en la vida o hemos caído en la monotonía. Tal vez a veces solo queda abrazar el caos y admitir que todo está perdido para comenzar de nuevo y probar algo distinto. Puede que en ese reinicio encontremos nuestro camino.

¿Sabías que…?

Ke Huy Quan es conocido por su papel como Short Round en ‘Indiana Jones y el templo de la perdición‘ (1984) y Richard Wang en The Goonies‘ (1985) cuando era un adolescente. Pese a empezar su carrera muy joven, no estuvo en la pantalla grande o chica por más de 20 años. En una reciente entrevista, reveló que simplemente no habían papeles para él, pero que, a pesar de ello, no renunció nunca a su sueño de convertirse en una estrella del cine.

Créditos: Twitter

Puedes verla en: Apple TV+

Rating: 4.5/5

Ficha Técnica

The Review

'Todo a la vez en todas partes' (2022)

4.5 Puntos

Recomiendo esta película para todo público que quiera disfrutar de una historia original, loca y divertida. Estamos ante una obra que superficialmente puede parecer una oda al absurdo, pero que contiene un poderoso mensaje sobre abrir tanto los ojos como el corazón hacia las personas que queremos y a nuestros sueños. El paseo caótico en el que nos sumerge es solo la excusa para hacernos llorar y reír de un momento a otro, una y otra vez, hasta quedar agotados emocionalmente. Lo quiere hacer todo abrumadoramente a la vez y es una apuesta arriesgada que toca a cada uno de una forma diferente, según cómo conectemos con ella, generando una mezcla de sentimientos poco común en el cine actual. Finalmente, habrá quien se sienta reflejado o no, pero no es de las cintas que te deja indiferente, pues todos nos hemos sentido derrotados al menos alguna vez en la vida o hemos caído en la monotonía. Tal vez a veces solo queda abrazar el caos y admitir que todo está perdido para comenzar de nuevo y probar algo distinto. Puede que en ese reinicio encontremos nuestro camino.

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